El momento y la forma donde uno come o bebe alimentos influye directamente en la cantidad de calorías que se consumen. Por lo tanto, es importante abarcar este tema con mucha atención porque te puede ayudar a alimentarte de una forma más consciente, evitando por las noches el consumo de calorías innecesarias.
Primero que nada es esencial poner en contexto las razones por las cuales puede llegar a darse una refacción nocturna, entre estas podemos encontrar las siguientes:
Aburrimiento
Estrés
Cansancio
Emociones
Sensación de sed
Distracciones
Para saber manejar las situaciones mencionadas anteriormente podemos tomar acción realizando distintos hábitos diariamente, haciéndolos a fin de tener una rutina que beneficie nuestra salud.
Primero, es claro que la falta de horas de sueño puede desencadenar una serie de consecuencias que afectan desde nuestro metabolismo de glucosa, hormonas relacionadas al hambre, el apetito y la regulación de peso corporal. Por lo que se ha visto que a razón de obtener pocas horas de sueño, podemos llegar confundir el cansancio con el hambre. Por lo tanto, es ideal buscar la posibilidad de dormir de 7 a 9 horas todas las noches.
Otra de las técnicas que es importante poner en práctica es no comer frente al televisor, computadora o videojuegos, ya que estos provocan la distracción dando lugar a que las señales de saciedad que se envían al cerebro se reduzcan, dando como consecuencia la distorsión de la memoria de la cantidad de bocadillos ingeridos.
Una de las técnicas de prevención que es efectiva para evitar una refacción nocturna es realizar una planificación anticipada de preparaciones saludables y la compra de los productos nutritivos en el supermercado o mercado cercano, enfocada en aumentar el consumo de proteína y la carga de fibra.
Además es esencial tomar conciencia identificando las señales de hambre y saciedad, evitando de esta manera el comer en exceso en la noche. Si llegara a tener hambre después de la cena realice las siguientes preguntas:
¿Tengo hambre?
¿Tengo sed?
¿Estoy cansado/a?
¿Estoy aburrido/a?
¿Estoy triste o enojado/a?
Si todavía llegase a tener hambre luego de descartar las preguntas mencionadas anteriormente, está bien tomar un refrigerio o snack, pero con la diferencia de consumir porciones pequeñas lentamente y sin distracciones.
Te invitamos a que te acerques con nosotras, haz tu cita y no dudes en empezar un cambio de estilo de vida saludable.
Nosotras te acompañamos en el proceso de alcanzar tus metas.
Estamos para servirte,
Maria Echeverría Nutricionista Clínica
Referencia: 5 Tips to Curb Your Late-Night Snacking. (2020). Retrieved 10 February 2020, from https://www.eatright.org/health/weight-loss/tips-for-weight-loss/5-tips-to-curb-your-late-night-snacking
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